El paranaense defiende los colores del Bicho de La Paternal desde agosto de 2018, pero su aprecio por Unión de Santa Fe, su equipo formador y que lo hizo debutar en Primera, siempre lo tiene presente. Memo, iniciado en La U de Paraná, hizo un repaso de su carrera futbolística hasta su actualidad en el mano a mano con El Pelotazo. Además charló sobre su presente en Argentinos Juniors, puntero de la Superliga 2019/20 y su manera de sentir el fútbol.
"Buenos Aires, al ser una ciudad tan grande, por ahí no se conoce mucho a los jugadores porque no se los ve constantemente, por eso no existe mucha presión y se vive distinto. En la cancha sí es diferente, sobre todo en la platea, que es bastante exigente. Y está bien porque acá (por Argentinos) jugaron grandes futbolistas como Diego, Batista, Riquelme, Redondo, cuando tienen que armar un once ideal se les arma el lío", contó el paranaense sobre su experiencia de vivir y sentir el día a día en Argentinos Juniors.
“Zoque” empezó su carrera de niño en el Club Universitario y a los 8 años comenzó en las inferiores del Club Atlético Unión de Santa Fe. “De ahí se dio rápida mi carrera”, reconoció Fausto que debutó en la máxima división del fútbol argentino en el “Tatengue”. Su segundo club en Primera fue Arsenal de Sarandí que estuvo a préstamo por un año en la temporada 2013-14 y ganó la Copa Argentina 2013, regresó a Unión estando en la B Nacional, ascendió y en 2016 pasó a Independiente Rivadavia de Mendoza en la segunda división.
“En mi regreso a Unión rescindo contrato porque uno siempre busca continuidad, es difícil permanecer y mantenerse en las categorías grandes. Sabía que era un gran desafío Independiente Rivadavia porque no estaban en un buen momento. Cambió la comisión directiva, se armó un gran equipo y salvamos la categoría ese semestre”, contó Montero.
Ahí conoció a Alfredo Berti, que era su DT, “él me apoyó mucho, me dio mucha confianza para revertir mi situación, de sentirme cómodo y me afianzó en la posición de 5. Hay volantes que cumplen muchas funciones y después se acomodan en una. Yo me acomodo en cualquier posición. Cada técnico tiene distintos sistemas y uno se tiene que amoldar”, manifestó el paranaense.
Asimismo reconoció que su predisposición y adaptabilidad le permitió ser tenido en cuenta en los clubes. “Hay chicos que no les gusta jugar en otras posiciones y sólo se conforman en una. Uno siempre tiene que estar preparado. En inferiores empecé de enganche mentiroso, pasé al doble cinco, debuté como lateral por derecha y jugué hasta de volante por izquierda y en Arsenal de 4”.
“En Independiente me va muy bien, en los últimos partidos que estábamos salvando la categoría enfrentamos a Argentinos Juniors. El técnico era Gabriel Heinze que tenía buena relación con Berti, que lo había dirigido en Newell’s, y le ganamos en un partido muy importante para nosotros. Da la casualidad que renuncia el Gringo a Argentinos y lo recomiendan a Alfredo. Ahí él se comunica conmigo justo en el momento que tenía otras propuestas, pero ni lo dudé y me fui a Argentinos Juniors”, contó.
El paranaense arribó al equipo de La Paternal en agosto de 2018 y si bien no ha tenido mucha participación en lo que va de su estadía apuesta constantemente al equipo. "No he tenido mucha continuidad en este torneo. Pero por suerte hemos tenido un gran cambio con respecto al anterior que estábamos peleando el descenso y ahora nuestra actitud de calidad motivó al plantel trajo confianza e intensidad que se vio reflejado en los resultados. Ahora con el título de River en Copa Argentina se nos abrió el cupo a la Sudamericana 2020 y por el momento la Libertadores 2021".
Reconocimiento del mundo tatengue
Fausto comenzó a temprana edad su vinculación con Unión y hoy en día, a pesar de vestir otra camiseta, el reconocimiento de los hinchas tatengue hacia el paranaense es constante. “Haber salido de inferiores y haber estado en los momentos difíciles del club marca mucho. Me han tocado momentos malos, donde costaba ascender. A mí me tocó vivir esos momentos de golpe, me marcó muchísimo. En su momento me fui a Arsenal, ahí conseguí la Copa Argentina con Alfaro como DT, y cuando volvía a Unión me tocó ascender. A eso la gente lo reconoce”, señaló el futbolista que se radicó hace muchos años en la capital santafesina.
“A veces las luces te marean, pero uno tiene que saber de dónde vino, eso es importante en el fútbol. Uno tiene que ser buena persona, porque el día de mañana uno nunca sabe que puede venir. Por eso siempre hay que ser bien agradecido”, reconoció Montero.
El entrerriano también es consciente del esfuerzo que implica desde joven dejar a las amistades, relegar festejos familiares y otras cuestiones. “Es un desgaste importantísimo en el que hay que dejar la familia y no hay contención, quedas encerrados en la pensión del club tanto tiempo donde llega un momento donde el bocho se desgasta y uno no quiere saber nada”, relató.
“A mí me tocó la suerte de estar cerca, con un gran sacrificio. Pero no es lo mismo estar lejos de tu casa. Hay que dejar cosas, por ejemplo al viaje de estudios no pude ir, yo pude llegar y mantenerme, pero hay otros que vivieron lo mismo y no llegaron”, sostuvo Montero al tiempo que recordó la experiencia que casi le hace dejar todo de lado.
“En el último año me cambié de escuela porque no conseguía curso de mañana en la escuela del Cristo para ir a entrenar, los compañeros que tuve desde jardín en el Cristo me querían regalar el becado del viaje pero no podía, porque si tomaba la decisión de pasarla bien, de disfrutar, tiraba todo el trabajo del año por la borda. Igual ya estaba radicado en Santa Fe y metido en eso, pero el día que me dijeron tomé la decisión yo sólo”, recordó. Y acotó: "En inferiores he visto miles que se han quedado en el camino, que eran muy talentosos, pero creo que la cabeza juega mucho".
Montero reconoce que su buena conducta de juego le permite ser tenido en cuenta en los equipos que defiende, a su vez que remarcó la importancia de pensar bien las elecciones que se hacen durante la carrera del futbolista. "Por ahí aparecen muchas propuestas, uno prioriza lo económico o lo futbolístico y uno por ahí tiene que saber decidir, creo que he tenido buenas elecciones. Eso sí después no hay que relajarse y luchar por más. Pero mantenerse es muy difícil por eso en el día a día hay que apuntar a más. La palabra ganar es única en el fútbol, porque cuando ganas tenés todo y uno puede pelear contratos, muchas cosas y cuando se pierde se hace complicado. Uno siempre analiza el contexto, el club, el plantel, todo con lo relativo a que se aspira como equipo, todas esas cosas suman".
La ilusión del campeonato
"Nos quedan 7 finales, son pocas fechas pero 21 puntos en juego. El tema es que no hay ningún equipo cortado y la brecha es muy corta. A la ilusión no te la quita nadie,si cinco fechas atrás me preguntaban dudaba”, reconoció el mediocampista a poco de finalizar la actual Superliga que se retomará en enero tras el receso.
“Hasta último momento no se va a definir. Creo que el mano a mano se va a dar con River, porque es el equipo que tiene el mejor fútbol y se ve la diferencia. Es difícil marcarlo con distinto ritmo, nosotros lo íbamos ganando y nos empatan sobre la hora. Es un equipo con mucha intensidad y que sabe a lo que juega. Gallardo ha marcado una época en River con todo lo que ha ganado, es un técnico que está más allá del fútbol argentino. La mentalidad del técnico de buscar un reemplazo de los que se van que sea igual o mejor, tiene un buen grupo de trabajo”, reconoció Fausto Montero.