El ex lateral izquierdo de la selección española, Independiente, Getafe, Atlético de Madrid, Recreativo Huelva y Nacional de Montevideo, entre otros, está abocado al Turismo Nacional Clase 3 y no se aleja del sueño de poder volver al fútbol como entrenador. El tandilense repasó su carrera en España, la convivencia con los monstruos que formaron el legado del fútbol español, detalles de su carrera, el presente en el automovilismo y su futuro.
Mariano se retiró del fútbol profesional en 2011 jugando para Tigre en la primera del fútbol argentino. Del verde césped pasó al calor del asfalto en la categoría Fiat Linea Competizione. Así fue su debut en el automovilismo que ya lo había tenido como protagonista a su padre, el Tano Pernía y que en la actualidad lo tiene a su hermano Leonel en el Turismo Carretera y otras categorías.
Los fierros y la velocidad llegaron de la mano de su padre y de las veces que quedó maravillado cuando lo acompañaba a las carreras de TC. “La pasión surge de criarme en los boxes. También porque al principio mi viejo tenía el taller lejos de casa y luego se lo hizo en una parte de la quinta donde vivíamos y ahí empezó a tener el auto de carrera”, recordó.
Pernía reconoce que es amante de los autos pero de mecánica prefiere dejárselo a los que saben. “Voy aprendiendo despacito pero tenemos un equipo detrás. No es que tengo que bajarme, y como hacía mi viejo,y alinear el auto o tengo que cambiar un amortiguador. A eso lo hacen los mecánicos Hoy el automovilismo es muy profesional y el piloto se dedica a andar lo más rápido posible”, sostuvo el actual piloto en el Turismo Nacional C3.
Y comparando fútbol y autos, el nacionalizado español reconoce que el automovilismo implica mucha presión y estrés mental. “Si bien dura 40-50 minutos, no te podés relajar ni un segundo porque es curva a curva. Tenes 5 o 6 segundos de recta pensando si el de atrás te alcanza o no, si te salís de la succión, si le agarrás la succión, si le tiras el drenaje, si no se te va a tirar. Todo eso a una velocidad muy alta, el automovilismo por ahí cansa mentalmente y no tanto físicamente, y el fútbol es al revés por el esfuerzo que implica pero tenés momentos de distracción”.
Sobre la definición del Turismo Carretera reconoció el buen presente de Werner y no descartó a Canapino. “De Mariano me han hablado muy bien y sé que se preocupa por todos los detalles y por eso está donde está. Y Agustín está como todos los años que salió campeón. Entra a los Playoff con mucha incertidumbre pero una vez en la definición siempre está entre los tres primeros.
En la vida de Mariano Pernía el paranaense Bruno Marioni tiene mucho en común. Ambos fueron futbolistas, compartieron equipo en Independiente, pasaron al automovilismo y hasta son familia. “Mi hermano empezó a salir con su actual mujer, que es hermana de mi esposa y a su vez la tercera hermana es la esposa de Bruno”, contó.
Mariano fue el protagonista del inicio de la relación entre Bruno y Gisella. “Ella estaba estudiando periodismo y necesitaba hacer una entrevista a un jugador de Independiente para entregar un final. Como era amigo de Bruno le dije para hacer la nota. Después volvieron a coincidir de casualidad en un lugar y se terminaron de conocer”, comentó.
CLUB DE VOLANTES ENTRERRIANOS
“Paraná tiene uno de los mejores autódromo de Argentina, tiene un montón de todo técnica, mucho huevo y aparte salen lindas carreras porque tiene muchos lugares de sobrepaso. Y además va mucha gente sea la categoría que sea”, reconoció.
ARGENTINO EN LA SELECCIÓN ESPAÑOLA
España se convirtió en su segundo hogar, no sólo por realizar el mayor tiempo de su carrera en la liga española sino por haberse nacionalizado y defender la camiseta del seleccionado. En 2006 obtuvo la nacionalidad y Luis Aragones lo citó para formar parte de la lista que comenzó con uno de los mejores ciclos de futbolistas españoles que años más tarde lo llevaron a ser campeones del mundo en 2010.
“Esa etapa es producto de un trabajo de años, porque en Europa se acostumbra a hacer las cosas a largo plazo y cómo se deben hacer. Yo creo que en Argentina tenemos la suerte de mover una piedra y sale un gran jugador, lo que hace que las dirigencias se relajen un poco y no puedan ser protagonistas en los torneos”, señaló.
“Por ahí en los países donde no tienen tantas posibilidades de escoger tienen que hacer un trabajo a largo plazo. No tengo duda que si argentina hiciese un trabajo así sería número uno sin ninguna duda. Lo mismo que Brasil, apostando a que nunca más tenga dudas de que su selección estaría peleando con Argentina”, añadió el ex lateral izquierdo.
“Scaloni ahora es un proyecto que se está apoyando, me gusta porque si bien fue muy resistido, nunca estuvo en peligro de irse de la Selección y esas cosas me gustan cuando los directivos tienen la decisión de apoyar un proceso está bueno”, opinó.
Puyol, Raúl, Casillas, Sergio Ramos, Morientes, Xavi, Iniesta, Villa, Fernando Torres, Michel Salgado son algunos de los nombres que formaron parte de ese plantel que quedó en los octavos de final del Mundial de Alemania. Pero consiguieron la Eurocopa 2008 y en el 2010 el mundial de Sudáfrica.
“Digo que tuve dos suertes. Una de ver cuál es el camino para lograr tantas cosas, no solamente es tener condiciones naturales, técnica y habilidad, sino tener el profesionalismo, la grandeza humana, la sencillez y las ganas para lograr todo lo que se logró. Sin dudas que es importante la parte técnica, pero la parte profesional y humana es tan o más importante que lo otro”, remarcó.
Es una clase de jugadores que juegan a una velocidad que no se ve en el fútbol argentino. “Lo hablaba con mi hijo que no hay que demorarse con la pelota en los pies. Porque los 2 segundos que tenés la pelota en los pies, otro jugador recorre 20 metros, entonces cuando vas a dar el pase no tenés a nadie libre y eso sucede en Europa. Si la tienen es por que deben, sino la largan enseguida y tienen la habilidad de no llegar al roce. Si ellos creen que puede haber un contacto la largan y se la van a jugar si esquivan un roce o si al jugador que tienen adelante está en situación de gol”, puntualizó.
El tandilense sostiene que en el grupo había mucha gente muy trabajadora, el claro ejemplo el de Xavi Hernñandez que solía quedarse más tiempo luego de los entrenamientos. “Me pedía que nos quedáramos para correr un poco más porque no le había alcanzado en los entrenamientos. Y si hay alguien a quien no le falta correr es a él. Eso te da la pauta de por qué fueron lo que fueron durante esos años”, destacó.
Y el hacedor de todo eso fue Luis Aragonés, El Sabio de la Hortaleza. “Pude ratificar porque le decían así. Era un crack a la hora de manejar los grupos, más allá de todo el conocimiento que tenía adentro de la cancha. Eso es sin dudas otra de las cosas que me llevo en el baúl de los recuerdos”, precisó Pernía. Y esa identidad que le imprimió le sirvió para cosechar los logros en 2008 y 2010. “La primera charla luego de la convocatoria para la Eurocopa dijo ‘yo confié en este grupo para el Mundial y sigo confiando en este grupo que nos va a dar grandes resultados’”, comentó el exfutbolista.
Lo que jugó a favor de esa camada de España fue el conocimiento que había entre cada uno de los jugadores. Sin dudas que lo que más benefició fue que la mayoría de los futbolistas jueguen en Barcelona, otro tanto en el Madrid y de otros pocos equipos, como Pernía en el Atlético de Madrid. “La mayoría eran parte del mismo plantel que entrenaban todo el año juntos y el resto se adaptaban rápido a cualquier sistema”.
La estrategia de Aragonés era realizar entrenamientos de doble turno, pero dividiendo las tareas. “A la mañana velocidad, reducidos y trabajo físico no en demasía. Y a la tarde hacía la parte táctica. Entonces eran de una hora y se te acortaba el día y es como entra todo más rápido y mejor porque tenés la capacidad de asimilar todo”.
JUGADOR DE SELECCIÓN
La convocatoria no fue por simple azar o porque se lo regalaron, la Selección para Pernía llegó por las buenas actuaciones con el correr de los años y los buenos números en los equipos donde estuvo. él mismo considera que la citación uno se la gana “con la permanencia en un alto nivel futbolístico”.
“Fui a la selección por mérito propio. Cuando me llamó Aragonés yo le agradecí por la convocatoria y me dijo ‘no chiquito, no tiene nada que agradecerme, yo lo llamo porque lo necesito. En el fútbol nadie regala nada’. Y tiene razón”, recordó.
Y continuó: “Aunque la gente crea que sí, es cierto que a la Selección no llega un jugador por acomodo o porque tiene el apellido de o porque económicamente le sirve a alguien. Por ahí puede pasar en igualdad de condiciones, dos jugadores en una misma posición, con un buen momento, en dos clubes grandes y bueno por otra cosa va uno de los dos. Pero normalmente es decisión del entrenador, yo no creo que un entrenador juegue a convocar a un jugador que no lo convence”, reflexionó.
RAÚL, ESTANDARTE ESPAÑOL
“El miedo mio a la hora de entrar a la concentración española era con los más grandes. Raúl, Michel Salgado, Canizares, pero la verdad que me sorprendieron gratamente. Desde el primer momento que llegué Raúl estaba esperándome en la puerta del hotel para recibirme y hacerme sentir cómodo. Son cosas que te marcan y te hacen ver lo grande que son”, recalcó Mariano.
TANO PERNÍA
Mariano viene de una familia de deportistas que comenzó su padre Vicente "Tano" Pernía, en las décadas del 70 y 80 jugando en Estudiantes de la Plata, Boca Juniors y Vélez Sarsfield.
“Primero el Tano es mi viejo y lo amo, después fue una persona que me marcó mucho en lo que fue el sacrificio, el trabajo, la entrega pero más que nada con su forma de ser”, reconoció.
Mariano tiene un vago recuerdo de su padre en las canchas de fútbol ya que se retiró en 1984 cuando el actual piloto tenía 7 años, pero le quedó guardado la perseverancia y a capacidad de mejorarse día a día. “Cuando fue operado de la rodilla para hacer fuerza en los cuadriceps nos hacía la típica del caballito en la pierna subiendo y bajando”, sostuvo.
Hasta ha tenido referencia de otros grandes jugadores como Daniel Bertoni, que le tiene un gran respeto al Tano. “Bertoni un día me dijo, el único jugador que me daba miedo era tu viejo. Y para que te diga un tipo de ese recorrido tiene que haber sido áspero”, recordó el exdefensor.
ZINEDINE ZIDANE
Entre los cracks que le tocó cruzarse en su carrera se encuentra Zinedine Zidane. Al Galo lo enfrentó en el Real Madrid y en la selección de Francia, y no se guarda ningún elogio para el ex número 5. “Es impresionante”, aseguró Pernía que entre sus recuerdos añora una de las camisetas que usó en el Madrid.
De los tantos enfrentamientos recordó la jugada que quedó inmortalizada en una foto en medio del mundial de Alemania 2006. Pernía junto a Xavi intentando detener a Zidane que les pica la pelota. “Esa jugada en particular es un desborde que vino por mi punta, viene un centro atrás a la pelota voy yo y también sale Xavi. Nos tiramos al piso, él patea al arco y la pelota se va por arriba. Son los Mundiales y en esas situaciones dejás la vida, por ahí en un partido normal no se si vamos los dos al piso”, manifestó.
“Es muy difícil robarles la pelota a ese tipo de jugador como él, Messi, Ronaldinho, Kaká. Entonces ellos están esperando que vos vayas a quitarle la pelota, tenes que lograr que no la tengan. Con eso ya tienen ganado mucho. Lo primero que tenés que hacer es tratar que no te gambeté y después si logras eso que no la tenga. Que se la de a un compañero que sepa un poco menos”, agregó.
SERGIO RAMOS
“Hablando con Raúl Albiol, mi compañero en Getafe con 18 años y compañero de Ramos en la sub-17 estando en Sevilla, me dijo este chico es una bestia. Va a ser todo lo que quiera ser porque tiene una potencia física y una calidad impresionante. Dicho y hecho. Después se le sumó que tiene cabeza de crack y sigue logrando todo”, manifestó sobre el presente del actual defensor y capitán del Madrid y la selección española.
CACHAVACHA FORLÁN
Diego Forlán es un amigo que le dejó el fútbol. Con Cachavacha compartió inferiores en Independiente y las vueltas de la vida lo reencontraron en el Atlético de Madrid. “Acá ya éramos re amigos y allá nos cruzamos nuevamente a ese nivel”, sostuvo Mariano.
Pernía reconoció que las cualidades deportivas de Forlán ya se notaban desde chico y siempre entrenó más de lo normal. “No me sorprendió para nada su gran nivel. Desde inferiores veía que se quedaba a entrenar solo, pateaba contra la pared. Vos ibas a entrenar y él ya estaba en el gimnasio. Diego es el claro ejemplo de un chico que se propone llegar a lo más alto porque por ahí en condiciones naturales, que las tenía pero tuvo que pulirlas, y las pudo hacer gracias a su sacrificio. Y no son muchos los jugadores que hacen eso”, remarcó.
Ese tipo de jugadores le hicieron entender a Mariano que el sacrificio individual es muy importante a la hora de buscar un objetivo concreto. “Odio cuando la gente dice ‘cómo pudo llegar tal jugador a Primera’ y te puedo asegurar que, de arranque, ese es el mejor jugador del barrio o del club, porque el que llega es el más huevo y garra le pone. Y que también año a año le va sumando cosas”.
“Menotti dijo una gran verdad. ‘Hay jugadores buenos y muy buenos. Los muy buenos son los que todos los año le suman algo más a su forma de juego. Por ejemplo el que no le pega bien con la pierna inhábil al año siguiente le pega bien y así. Si el jugador que es bueno no tiene la capacidad de evolucionar es complicado llegar a primera. Encima cada vez más cerca la presión que tienen es aún mayor”, sostuvo.
LIONEL MESSI
A otro que enfrentó en el inicio de su esplendor fue a Lio Messi. Producto de esos cruces, Pernía destacó la calidad y velocidad con que maneja el balón. “A la velocidad que hace todo es impresionante. No creo que se pueda hacer un compacto con no más de 10 jugadores que le hayan sacado la pelota en la primera jugada. Si puede haberla perdido en el tercer o cuarto jugador, pero si gambetea y tiene pase de gol lo da por que cuenta con una habilidad fuera de lo común. Si bien por ahí no le da el físico, pero si quisiera tener la pelota por 5 o 10 minutos lo hace”.
Al respecto, Mariano entiende que toda esa capacidad pasa por la cabeza del futbolista. “Messi podría haber jugado todo el tiempo en Barcelona y ganar 2 botas de Oro y ser el mejor jugador del Mundial una vez. Sin embargo se propuso ser lo que es, siempre estar 9,50 / 10 fisicamente, 9 en el peor momento que estuvo. Le gusta jugar absolutamente todo”, reconoció.
En una de sus charlas con Gabriel Milito, Mariano recuerda que una vez le contó la particular charla que tuvo Lionel con Pep Guardiola. “Le fue a preguntar por qué estaba mal y dice porque el primer cambio siempre soy yo cuando vamos ganando. Y Guardiola le dice ‘ese es tu problema?’, y él le dice ‘si yo quiero jugarlo todo y ser goleador. Porque en el momento que estamos 3-0 es el momento que puedo hacer más goles’. Bueno listo vas a jugar todo y empezar a batir récords de goles, de todo”.
“Eso te da a la clara de un chico que no se conforma con todo lo que le dió la vida. Quiere ser el mejor durante mucho tiempo, a veces cuando el Barcelona ganaba y no metía goles y otro jugador estaba al mismo nivel de goles que él, se iba re caliente a la casa. Eso te habla de la competencia que tiene. Eso es lo que te mantiene ahí arriba porque todo el mundo dice ya ganó todo, qué motivación tiene?. Nada, sólo ser el mejor del mundo hasta donde pueda y cuando él sienta que no puede ser el mejor seguramente se va a retirar porque no se conforma con jugar bien”, manifestó.
JUGADORES QUE LO DESLUMBRARON
De los que compartió equipo hay dos futbolistas que le llamaron la atención. Uno es Iniesta, porque era muy chiquito y en ese entonces jugaba poco en el Barcelona, pero me di cuenta que era algo totalmente distinto y él otro es Puyol. No solamente la garra para marcar y robar una pelota, sino que técnicamente era muy bueno. Se ponía a hacer cosas con las pelotas y eran cosas de un tipo habilidoso pero por eso quedan marcadas en el tiempo”, aseguró Pernía.
Para el ex lateral izquierdo del Atlético de Madrid siempre hay algo que destaca a ese estilo de jugadores que con el tiempo es lo que la gente recuerda. Por ejemplo Gabi Milito “que uno lo tenes como un jugador que sale jugando con mucha elegancia, con categoría, que ordena el equipo, pero pegaba unas patadas terrible y nadie se acuerda porque lo otro era tan bueno. Con Puyol pasa lo mismo, porque metía tanto y luchaba por una pelota que por ahí se lo recuerda por eso. Sino no te mantenes tantos años en la Selección y el Barcelona”, subrayó.
CAMISETAS DEL RECUERDO
Mariano Pernía es uno de esos jugadores que aprovechó los momentos oportunos para atesorar para siempre camisetas de grandes referentes del fútbol mundial, si bien no son muchas, si “son lindas”.
“Las he pedido muy puntuales y muchas veces no las conseguía porque las pedía después del partido. Pero una de las más importante es la mía de la selección española firmada por todos esos monstruos, después del mundial”, señaló.
Entre ellas tiene la de Zidane en el Real Madrid, la de Juan Román Riquelme en el Villarreal, de Diego Forlán en el Atlético, dos de Messi “la amarilla con el número 30 y otra con la 10”. También de Samiel Eto’o, David Beckham, y las de otros amigo como Anibal Matellan, Maxi Rodríguez, la de la Perla Reyes con quien éramos muy amigos, y la de Leo Franco que “es de arquero y no sirve tanto pero es de mi mejor amigo”, comentó con gracia.
FUTURO EN EL FÚTBOL
Si bien el presente es el automovilismo, Mariano anhela volver al fútbol pero como entrenador. “El fútbol me encanta, es más creo que me retiré antes de tiempo. Estar adentro de una cancha de fútbol me apasiona, el fútbol me apasiona”, aseguró Pernía aunque es consciente que en el momento de tomar la decisión de dar un paso al costado puso en consideración muchas cosas.
“Cuando dejé de jugar, en mi último año en el Atlético Madrid, tuve un accidente muy grande y me cambió un poco la cabeza. Ahí empezas a valorar cosas que cuando estás en la movida no te das cuenta, lo importante que es y no le das importancia. Poder despertarte y estar con tus hijos y disfrutar de la vida. Es más importante por ahí que lo que hacemos normalmente”, señaló.
“Si me preguntás fútbol o automovilismo no tengo ninguna duda. Fútbol toda la vida si bien el automovilismo me apasiona, me encanta y voy super contento y me cubre por ahí la falta que me haría competir. Siendo futbolista competís todos los días para ganarte el puesto en el equipo y después contra el rival. Esa competencia es lo que extrañamos los que fuimos profesionales cuando nos retiramos, o yo particularmente es lo que extrañé. El automovilismo me lo tapó un poco”, reconoció el tandilense de 43 años.
Ahora está en la última parte del curso de entrenador y espera en algún momento tener la oportunidad de trabajar y brindar lo que adquirió con los años de carrera y de los entrenadores que tuvo. “No es fácil hay que formarse y aprender mucho. No es lo mismo estar adentro de un plantel que manejarlo. Suelo hablar mucho con Forlán, Milito, Garnero y un montón de compañeros que tuvieron la oportunidad de dirigir y todo de aprender lo máximo posible para no cometer errores. Trato de tomar lo que me sirvió o lo que creía que me servía en el manejo grupal de los técnicos y después ponerle mi impronta”, puntualizó.