En febrero del 2021 Mariano emprendió el proceso más importante de su vida presidiendo el club de su ciudad y de sus amores, el Club Atlético y Social San Benito. Con un gran respaldo de allegados e hinchas del Santo, el Tanque encabeza el proyecto que busca revalorizar la institución y brindar un espacio ideal para la familia deportiva. "Sueño con tener un club de primera y el poder brindarle a los deportistas y los socios todo lo que necesitan".
"El amor, los sentimientos por el club, el querer progresar y querer llevar adelante esta responsabilidad y el apoyo de la gente fue lo que me llevó a tomar la decisión", reconoció Mariano. "La gente me dijo que vaya para adelante. Y fue una decisión para nada fácil porque son muchas las responsabilidades, sobre todo lo que sufre la familia que tiene que ceder un poco de su tiempo para yo poder abocarme al club".
San Benito cuenta con al menos 100 socios que abonan una cuota societaria de $270 y los deportistas aportan, además, $210 de cuota deportiva que es directamente para los entrenadores. "Eso alcanza para la luz y ahí no más. Vamos viendo cómo subsistir, pero estamos con muchas ganas organizando actividades para recaudar y sacar adelante el club. También para ayudar a los deportistas porque por ejemplo en la Liga Paranaense exigen una credencial, una ficha y estudios médicos. Son gastos para nosotros y para los padres de los chicos"
La ayuda también la buscan en el municipio local donde le han prometido su apoyo y los asisten con herramientas para el mantenimiento de la institución. "Tenemos un diálogo abierto y creo que vamos a conseguir algo. Lo mismo con los comercios locales con publicidades en los paredones y cerramos con un diario local una publicación mensual donde también van a estar esos locales".
Asimismo, Toffolini sabe que se está llevando a cabo un cambio total y la gente valora esa impronta. "La vamos llevando, la gente ha apoyado ven que hay otra actitud, otras ganas, no solo con el fútbol porque hay voley, hockey, fútbol femenino. Estamos reactivando las bochas, abrimos un espacio cultural con un profesor que enseña danza, otro dibujo. Estamos abriendo el panorama para que la gente se acerque al club y poder remontar esta situación donde tuvimos un año sin ingresos y los gastos siguieron igual", manifestó.
El proceso de Toffolini en San Benito está en marcha y con él llevó ambiciosos proyectos de renovación. “Sueño con tener un club de primera, poder brindarle a los deportistas y gente del club todo lo que necesitan. Lo veo, lo pienso y lo quiero llevar a cabo. Uno de los sueños es tener una cancha de básquet con parqué que hace 50 años es de portland, sueño con el piso y techo, de ahí arrancamos”.
“A los profes les digo que no dejen de soñar. Esa es mi mentalidad, después que lo concretemos es otra cosa. El objetivo es dar un club de primera a la gente para que todos puedan disfrutarlo al máximo, es difícil pero nada imposible vamos a tratar de dar lo mejor”, señaló el flamante dirigente deportivo.
Dentro de ese proceso de mejora añora en algún momento ofrecer las condiciones necesarias para lograr títulos deportivos. “En este torneo no le puedo pedir que salgan campeones o hagan algo extraordinario porque en realidad no estamos dándole la importancia necesaria. Pero obviamente cuando podamos le vamos a brindar todas las posibilidades para que ellos puedan hacer lo mejor”.
GOLEADOR
Decenas de goles tuvieron como autor a Mariano Toffolini durante su larga trayectoria futbolística que comenzó en Argentinos Juniors, tuvo un fugaz paso por Belgrano y se afianzó en San Benito. Uno de esos goles quedó registrado en la cámara de su colega, Javier Blettler, que lo acompañó aquella tarde de muy bajas temperaturas a Diamante para filmar el encuentro.
“Fue un invierno terrible y con una cancha dura, fue muy áspero. Pero es algo que volvería a hacer una y mil veces. Es inolvidable y con compañeros es lindo”. Ese partido en suelo diamantino terminó 3 a 1 con dos goles de Toffolini, uno de sombrerito
“El arquero Juan Tortul que sale, el defensor me da el segundo pase y la toco yo. El arquero ni la miró”, recordó el exgoleador. “Javier lo filmó detrás de ese arco porque no tenía batería la cámara y tuvo que poner un alargue. Gracias a Javier tengo ese gol”, añadió.
DETRÁS DE CÁMARA
Además del fútbol, la filmación es la otra pasión que atraviesa la vida de Mariano Toffolini. Sumado a su rol dirigencial, diariamente Toffo es camarógrafo en Canal 9, profesión que “me gusta, me apasiona y lo hago con gusto”.
“Es un laburo lindo que me gusta hacerlo y también implica relacionarme con mis colegas. Es un lindo ambiente. Hoy mi hijo es amigo del hijo de Beto Vera, eso es lindo”, reconoció Mariano que comenzó con la profesión en Canal Once en el programa Tribuna con coberturas de fútbol, luego pasó a Proyecto Fútbol hasta que se mudó de canal.
Y con su hermano Fabio también tienen un emprendimiento de hace más de 15 años para cobertura de eventos sociales en foto y videos Fotolini. El nombre surge de un juego de palabras con su apellido que nació “con un profesor de fotografía de mi hermano que le decía Fotolini. Y la verdad que pegó bien porque hoy nos asocian enseguida y los que nos conocen piensan que es nuestro apellido”.
UN PRIVILEGIADO XENEIZE
Su pasión por la fotografía y su amor por Boca Juniors lo llevaron a cumplir el sueño de todo hincha: jugar un partido en la Bombonera. Todo comenzó con una foto para participar de un sorteo y cuyo premio era jugar un cuadrangular en el estadio Alberto J. Armando. “Salí ganador. Me llamaron un jueves que el domingo tenía que estar en la Bombonera. No pregunté nada y solo quería saber cuando tenía que ir”, contó .
“Nunca pensé en mi vida que a los 39 años de edad me tocaría jugar en la Bombonera, fue hermoso. Encima salimos campeones e hice dos goles en el arco que da a Casa Amarilla”, recordó Mariano y hasta obtuvo fotos de ese momento festejando sus goles. “Fue algo soñado. Me quedé solo hasta que me cerraron las puertas, hasta que me echaron”.
De esa experiencia también pudo conseguir una foto con uno de los cracks brasileños. “Ese día justo la selección de Brasil fue a conocer la bombonera. Estaba Kaka, que fue imposible llegarle y se quedó solo a lo lejos. Y obtuve una foto con Dani Alvez”.
EL SOSTEN FAMILIAR
“La familia es todo para mi. Mis hermanos prácticamente se hicieron cargo de mi porque la situación familiar fue complicada por parte de mi madre que se nos fue muy pronto. Yo soy el más chico y siempre me apoyaron”, reconoció Mariano al recibir el cariño y afecto de todos sus hermanos.
“Hoy ellos ven el logro (de llegar a la presidencia del club) en ellos y es algo que emociona y da fuerza para lo que viene. Me dan espalda para llevarlo adelante porque ellos siempre van a estar atrás conmigo”.
Por la pandemia y luego de 30 años las fiestas de fin de año fueron distintas para la familia Toffolini. “Nos repartimos en partes y esta pandemia dio para eso. Fue una parte triste porque en agosto también perdimos a mi viejo. Pero nosotros siempre estamos juntos y al menos una vez por mes nos juntamos a hablar un poco. Gracias a dios se mantiene el vínculo”, rescató Mariano que contó con gracia la grieta que “divide” a la familia: “Los primeros 4 son hinchas de River y los otros 3 somos de Boca”.