Saltar menúes de navegación e información institucional Teclas de acceso rápido Nosotros
Automovilismo entrerriano

Ezequiel Bastidas, el dueño del TC2000 que sigue soñando en grande

A los 20 disfruta de la corona y sueña con el Súper. Corrió bicicross, enduro, karting y Fórmula Renault. El agradecimiento a sus padres y la dedicatoria a su amigo de carreras que falleció esperando un nuevo trasplante.

El joven piloto paranaense repasó la obtención del título y habló del futuro que posiblemente sea en el Súper TC 2000. Además recordó su trayectoria desde el BMX hasta la actualidad. Su amor por el auto de Fórmula. El rol fundamental de su familia. Los anhelos a futuro y sus intenciones de seguir progresando en el mundo fierrero en nuestro país.

“Todavía no lo puedo creer y es increíble esto que estoy viviendo. Es un sueño que venía planeando desde hace tiempo, se fue dando de a poco, por ahí algo impensado, pero que refleja el trabajo de toda la gente que me acompaña hace mucho tiempo”, reconoció el joven de 20 años.

Es el primer título en el automovilismo nacional de alta competición para el paranaense que desde muy temprana edad viene incursionando en los deportes sobre ruedas. “Es un desahogo total, un sueño cumplido y es una mochila muy grande que me saqué”, dijo. El joven reconoció que en los últimos momentos de la carrera en Buenos Aires en su cabeza pasaron cientos de recuerdos y del apoyo con el que cuenta carrera a carrera.

“Primero y ante todo la familia porque hacen un esfuerzo, porque todo cuesta y ellos se desviven para que pueda estar corriendo. Atrás se han dejado muchas cosas para poder obtener el campeonato. Esto es algo muy grande y es un pedacito que se les devuelve por lo que hacen”, sostuvo Exequiel.

Bastidas llegó a la final en el Autódromo de Buenos Aires con chances y conforme por la producción alcanzada a lo largo de toda la temporada 2020, pero el objetivo final estaba cerca. “Estaba tranquilo porque sabía que no tenía que demostrar nada, tenía que salir y correr como lo hice desde el arranque del campeonato. Ansioso estaba pero me notaba tranquilo”, manifestó.

“Es el primer campeonato que defino tranquilo y aparte empecé a recordar la definición del torneo de la Fórmula Renault pensando qué había hecho mal y eso me sirvió un poco como experiencia para definir este campeonato”, remarcó el piloto paranaense.

Y añadió: “Veo la definición y no lo puedo creer. Terminar así con un gran nivel del auto, con todo el equipo que ha trabajado muchísimo. Es el primer campeonato de Toyota en el TC 2000, así que fueron muchas sensaciones encontradas, situaciones que se dieron. Además comprobé lo que dicen que en la última vuelta se escucha todo y es verdad, se escuchan todos los ruidos”.

Ahora se viene una nueva etapa para el joven piloto entrerriano que tiene las puertas abiertas para escalar al Súper TC2000. “Llegar ahí es mi sueño desde que empecé en la Fórmula. Estamos trabajando en eso, con tratativas con varios equipos de la categoría. Nos estamos moviendo mucho ya que son pocas las butacas disponibles, no tenemos mucho tiempo y dependemos mucho del presupuesto. Por eso no es fácil pero vamos a seguir trabajando para llegar a lo más alto”, expresó Bastidas que además cuenta con propuestas para correr en Turismo Nacional y TC Mouras.

El 2021 ya cuenta con campeones entrerrianos y dos de ellos son de Paraná. Mariano Werner en el TC y Bastidas. Ambos se consagraron y la ciudad los recibió con una gran caravana y festejos en la Catedral. “No sabía nada del recibimiento pero algo intuía por que en la ruta paramos en una estación como 3 horas y mi viejo venía a 60, y yo tenía ganas de volver rápido”.

“Llegamos y estaba la autobomba y una cantidad increíble de gente que nunca pensé que iba a haber tanta. Que de paso le agradezco a los Bomberos Voluntarios que tuvieron la mejor onda y nos llevaron hasta la Catedral. Calle Gualeguaychú estaba repleto, en la Catedral también mucha gente saludando, sacando fotos. Nunca pensé en eso y menos que iba a salir campeón”, reconoció.

PASIÓN SOBRE RUEDAS

Durante 10 años, desde los 4 a los 17, Exequiel se destacó en bicicross donde consiguió un subcampeonato argentino y la participación en un mundial con tan solo 6 años de edad.

Entre medio, en un momento de su vida aparecieron las dos ruedas motorizadas y un poco motivado por la práctica que llevaba a cabo su padre. “Fue corto. Me compré una moto, me encantaba ir a entrenar e ir a compartir los fines de semana con mi papá. No me gustaba correr, pero si andar y disfrutar los findes adentro del circuito”, contó Bastidas que mantenía las ansias de competir en otra disciplina y apareció el karting.

Debutó en el 2012 y un año más tarde en el circuito sobre tierra en Nogoyá con el 110 salió campeón. Luego pasó de categoría a los Karting Sapucay 125, con un subcampeonato en 2015 en el torneo entrerriano.

“Fueron momentos muy lindos y de más grande decidí irme a las 4 ruedas. En un momento hacía las tres cosas juntas: karting, moto y bici. Mis padres me dijeron ‘pará, vamos a seguir una cosa’. Me quedé con lo que más me gustaba que era el karting y hasta ahora no me arrepiento”, recordó.

“En bicicross tenes la particularidad que es un circuito cortito de 40 segundos. Más que nada de explosión del momento, es más energético. En el auto y la moto necesitas un poco más de resistencia, obviamente el desgaste de la moto es mucho mayor al de un auto de carrera. Cada cual tiene su particularidad. En la moto no tenés 70-75º como adentro de un auto de carrera y no estás adentro por 45 minutos o una hora. La diferencia es clara, obviamente cada uno requiere su entrenamiento y se le dedica su tiempo. Creo que por ahí son deportes muy distintos pero necesitas prepararte física y mentalmente para ambos”, comparó el joven que lleva 16 años en el ambiente de la rueda.

Esas ganas de mejorarse como piloto también la mantiene en la impronta de aprender de la mecánica propia de los autos. “Me defiendo bastante, se lo básico. Me gusta saber porque siempre lo necesito e intento aportar un ayuda al equipo. Ya sea con mayor precisión o para identificar lo más rápido posible algún tipo de problema”, aseguró el joven piloto

“Soy de opinar, intento meterme bastante más que nada para ser un apoyo más o poder descifrar el problema. Obviamente uno arriba del auto lo siente más que siguiéndolo por cámara o intentando buscar el problema en la computadora”, dijo.

Asimismo, aseguró que su objetivo de vida es poder vivir del automovilismo. "Arranqué a los 11 años y ya sabía que quería hacerlo como profesión. Es algo complejo que seguimos trabajando y venimos por buen camino. Creo que con esfuerzo se puede conseguir y es lo que estoy intentando", sostuvo. Ezequiel también destina parte de su tiempo a trabajar en la empresa familiar de transporte.

“No somos millonarios, trabajamos y mi familia vive para que pueda correr. No tienen vacaciones, no tenemos vacaciones, no cambiamos de vehículos. Viajamos en las combis para dejar un resto para el auto”, reconoció.

Pero para lograr ese objetivo debe redoblar esfuerzos, sobre todo en la búsqueda de sponsors que ayuden en la parte económica. “Es la parte más complicada que hay. Pero es lo que decidí desde primer momento, quiero vivir de esto y poder mantener a mi familia el día de mañana”, destacó.

FÓRMULA RENAULT

“El auto de Fórmula es lo más lindo que he probado. La velocidad y la adrenalina que sentís arriba es hermosa, sostuvo Exe que fue el piloto más joven en debutar en la categoría con 15 años. “Fue una etapa linda donde también tuve la posibilidad de pelear el campeonato, y que por cuestiones ajenas no pudimos salir campeones. Y eso me abrió las puertas para estar donde hoy estoy”, recalcó el paranaense.

Ahí llegó de la mano de Mariano Werner a quien hasta el día de hoy le tiene un gran aprecio y a su familia. “Desde ese entonces tengo una amistad, e incluso sigo viajando con ellos y cuando corremos dos fines de semana seguido duermo con ellos en el camión”, contó.

Esa experiencia en la categoría lo hizo desear en algún momento ir por más y porqué no pensar en categorías cercanas a la Fórmula 1. Pero sus deseos fueron más autóctonos y se planteó obtener títulos en el automovilismo argentino

“Hoy es imposible manejar un auto de esos más que nada por la cuestión económica. Tuve un llamado después de haber salido subcampeón para ir a correr a la Fórmula 4 italiana, pero en su momento después surgió el problema con el dólar y se hizo imposible. De ahí en más siempre proyecté estar en Argentina, e intentar estar en las grandes categorías. Si bien hoy por hoy es difícil no es imposible”, reconoció.

ENTRENAR PARA SER EL MEJOR

Ezequiel dedica la mayor cantidad de tiempo a la preparación que requiere para ser un piloto de alto nivel. Semanalmente dedica al menos tres días para trabajar en la parte aeróbica, gimnasio y en la mente. Labor que desarrolla bajo las órdenes de su entrenador Santiago Tersich.

“Uno siempre tiene que estar preparado sobre todo en la parte coordinación y un poco de concentración que es fundamental arriba del auto. También necesitas estado físico para mantener el aire y el cerebro bien frío para resolver cualquier problema que pueda surgir en la carrera. Son 70 grados adentro del auto, necesitas estar frío y lo más rápido posible pensando cuando sale alguna circunstancia importante o a la hora de decidir una maniobra”, señaló.

Además tiene a varios colegas como referentes de los cuales se fija en distintas características para seguir aprendiendo. “Matías Rossi, Mariano Werner y Agustín Canapino hoy por hoy son los mejores pilotos de Argentina, siempre se saca un poco de cada uno”.

PILARES

En la vida y en la profesión de piloto de carreras, los pilares fundamentales de Ezequiel Bastidas son sus padres, su hermana y su novia. “Mi padres me apoyan en todo y es fundamental. Siempre digo que todos tiramos para el mismo lado y es algo muy importante para mi que me acompañen y sepan entender en los buenos y malos momentos”, reconoció y destacó la labor de Aldo y Rosana.

Siempre están con el carrera a carrera sufriendo, festejando o apoyando a su hijo. “A mi mamá le da un infarto en casi todas las carreras, es la que más sufre. Mi papá es más tranquilo. Si bien no lo puedo ver al momento de la carrera, después en la repetición cuando lo enfocan se está comiendo las uñas y en cualquier momento se empieza a comer los dedos”, contó

“Debe ser difícil, más que nada para mi mamá porque ninguno le salimos medio cuerdo, salimos todos para deportes raros. Mi hermana más grande es medio como nosotros, anda en moto. Cuando entrenabamos agarraba la moto, no la dejaron entrenar, pero si hubiese sido por ella estaría corriendo en moto”, recordó el paranaense.

El amor por los autos, en sí por los deportes que ha practicado llegaron a su vida por su padre. “Él es el que me metió en este mundo y me apoyó desde el primer momento”. Aldo Bastidas también incursionó en motocross, pero se destacó en los autos con el Rallý de Fiat 600 y en el TC 850 Entrerriano. “Recuerdo haberlo visto cuando era un poco más grande en el Rally”, contó Ezequiel.

Su familia atravesó un duro momento al instaurarse la cuarentena en el país ya que detuvo por completo el emprendimiento familiar de transporte. “Sacó todos los ahorros para que pueda seguir corriendo. Estoy 100% agradecido a ellos. Mi papá que lo llevó a todos lados, a recorrer los sponsors, a saludar, me sigue acompañando. No me va a alcanzar la vida para agradecerles. Un campeonato no basta para agradecer. Soy un bendecido en tenerlos al lado y que me acompañen en lo que más amo”.

Además de agradecer a su familia y amigos, el paranaense agradeció por el apoyo constante al equipo Toyota Young, a cargo de Lucas Benamo “que confiaron en mi desde el primer momento”. A su entrenador, Santiago Tersich, a los sponsors y le dedicó el título a su amigo Leonardo Heyda.

“Lamentablemente Leito falleció hace poco, era un gran amigo que tuve en mis comienzos en el Karting. Este campeonato es para él y para toda su familia”, manifestó Bastidas. Ezequiel, junto a Guillermo Suárez, acompañaron a Leonardo durante el primer trasplante bipulmonar. “Los tres arrancamos juntos en Nogoyá y pegamos una buena amistad. Estuvimos con Leo en Buenos Aires por varios días y pasamos momentos muy lindos”, recordó.

“Siempre recuerdo cuando ganó su primera carrera que estaba muy contento. También tengo presentes a sus padres que son grandes personas y que le mando fuerzas a ellos y toda su familia por el momento duro. Creo que hoy está en un lugar mejor y nos va a estar acompañando desde arriba”.

Teclas de acceso